Poesía

Yo tengo una gata que ronronea,

yo tengo una gata que habla mucho, cuando le interesa,

yo tengo una gata que le gusta tomar el sol.

Y yo tuve unos padres,

que envejecían, dependían, cumplían muchos años,

hace mil años por lo menos que nacieron.

Y Yo tuve unos padres,

que me querían, me estimaban, me adoraban,

y fui muy pero que muy feliz con ellos.

Y yo tuve unos padres,

que me compraban cuentos, me contaban historias y me enseñaron mucho,

y pude realizarme, crecer y volar, gracias a ellos.

Tengo una gata esmoquin, y unos padres de boda.

Tengo una gata que creo no añora a los suyos,

ya me tiene a mí de compañera y por lo visto le valgo.

Y yo tuve unos padres, encantadores y encantados,

Ilusionantes e ilusionados y esforzados y trabajadores.

Deja un comentario