Una vez, en la nocturnidad, me retiraba de sábado noche, iba sola… un hombre me perseguía, no se desde donde, pero empecé a escucharlo ya llegando a mi portal, metí la llave, abri y cerre rápidamente, ese hombre funesto se quedo fuera, me libre, esa noche me libre… me libre. Pero hay otras mujeres y niñas que no se libran… hoy por ejemplo el caso de la niña de ocho años violada por su padre, y dos amigos más.
Sentimientos:
Abusada, doblegada y maltratada.
Asustada, enfadada e indignada.
Utilizada, discriminada y explotada.
Violada, torturada o matada.
Hay justo la mitad de la población que es susceptible de sentirse así alguna vez, o muchas veces o siempre. Y es tan injusto, es de delito. Y llevamos así desde el comienzo de la civilización, que nunca como ahora nos cansemos de luchar las mujeres, siento y pienso y digo.
